No Praying For The Dying fue el primer disco de Iron Maiden que compré (antes no tenía con que). A mi me gustó, pero al parecer fue el único que lo escuchó con entusiasmo. Las críticas fueron devastadoras y hasta la propia banda reniega del sonido que lograron.Para mi no fue tan desastroso, lo escuché hasta el cansancio y las últimas dos pistas: Bring Your Daughter... To The Slaughter y Mother Russia me resultaron muy entretenidas.
A la banda le costó un poco adaptarse al main stream en el que estaba entrando el rock pesado. Muchas bandas fueron mil veces más populares que ellos sin haber contribuido tanto.
No hay comentarios:
Publicar un comentario