Como siempre me han dicho, las generalizaciones son malas. No todos los atletas y gente del espectáculo son completos ineptos mentales, pero la mayoría sin lugar a dudas cumple con todos los requisitos. Es cierto que Mike Mussina tiene un titulo de economista de Stanford y John Lennon profundizó temas políticos y sociales como ningún otro, pero ¿cuántos de ellos hay en comparación con los Mike Tyson y Kurt Cobains, los Maradonas y Pete Rose's? Sinceramente muy pocos.
Entonces basta. Basta de preguntarle a Ben Rothlisberger después de ganar el Superbowl como se siente y como vio el juego, basta de consultarle a hermanitas Williams si alcanzar su n-sima final de Grand Slam significa algo para ellas. Las respuestas no solo son estúpidas, quizás mas estúpidas que las preguntas, también son preparadas y provenientes de una mente vacía, incapaz en la mayoría de los casos de producir algo con sentido. En su descargo, debe ser muy fastidioso despues de terminar el Tour de France o una carrera de Formula 1, donde el desgaste corporal y mental es de tan alto nivel, que un hombresito en flux y corbata venga a preguntarte ¿Que te pareció todo campeón? ¿Cómo hiciste para ganar? Es que acaso no lo acabas de ver... tarado.
Las respuestas de la mayoría de estos seres son vacías, pero las que más risas me causan son las preparadas o las mentiras.
Es conocido que a la mayoría de estos atletas y artistas, sus agentes y jefes corporativos les entregan su "Manual de Procedimientos". Ese resumen que contiene las cosas que deben decir y las que no. Esto es muy importante para la mayoría de las organizaciones para las cuales ellos trabajan, desde la NBA hasta los estudios Paramount, no es lo mismo mercadear a Sinead O'Connor rompiendo y quemando la foto del Papa Juan Pablo II, que la de Sting dándole de comer a los niños en Biafra. No es lo mismo vender a José Canseco el cubano drogadicto que a Alex Rodríguez... el cubano niño bonito... ups... este hace poco también pasó a esta categoría...
Llegamos a donde quería llegar, siempre lo supimos, ¿cómo alguien puede ser tan perfecto? Alex Rodríguez, AROD y su llegada a los Yankees de Nueva York parecía un montaje de Disney. No sólo el All Star ShortStop estuvo dispuesto a cambiar su posición, para no "molestar" a la fanaticada ni pretender ofender al titular de la posición en la gran manzana, el otro niño consentido Derek Jeter, también Alex trajo todo su glamour, poder y buena actitud acorde con los cientos de millones que recibiría en el trato.
Por suerte los dioses del Baseball se han encargado de no premiar a este payaso con un anillo de serie mundial. Pero resulta nauceabundo ver como estos descerebrados no solo son capaces de transmitir el mensaje equivocado a cambio de los verdes, también son capaces de mentir a sangre fría cuando se les cuestiona sobre cualquier tema que pueda perturbar su perfecto mundo imaginario.
Hasta con lágrimas de cocodrilo defienden su posición, en el senado, en programas de opinión, en las iglesias... a su mamá que consideran lo más sagrado y después que les destapan la olla salen con más excusas ridículas sobre lo difícil que es ser ellos... pobrecitos.
No me interesa si los esteroides hacen daño o no. No me interesa porque los tomaron. No me interesa si quieren romper todos los records del mundo. Lo que SI me interesa es que el espíritu deportivo, el sentido de equidad que debe existir en el deporte y en el mundo predomine y estos seres definitivamente no han contribuido en nada a lograr ese objetivo.
En pocas palabras, muchos deportes se han convertido en una carrera arreglada, donde el resultado se logra meses y años antes en laboratorios. Muchos records opacados por sustancias que no existían en el pasado y que hacen la comparación entre atletas de distintas generaciones nula. A esto le ponemos la gota de capitalismo que hace que se polarizen los "talentos" en los equipos con mayor capital y el resultado es el mismo que obtendríamos en una pelea entre un perro poodle toy y un pitbull. Claro y ante todo esto, los organizadores, que les interesa que su show siga vendiendo, nos quieren hacer ver que se trata de una pelea pareja... el poodle podría dar un golpe mortal en cualquier momento... seguro...
Bonds, Palmeiro, McGwire y su combo no deberían ni siquiera ser considerados como jugadores de baseball. Sus récords deberían ser borrados y públicamente segregados del deporte. Arod también. Quizás no quedarían jugadores disponibles para armar una liga, pero al menos se garantizaría que la competencia es justa y equilibrada. Adicionalmente, no tendríamos que escuchar sus estúpidas opiniones y poses de niño bueno, al menos Al Capone admitía ser bien malo y no trataba de aparentar lo que no era. Eso para mi es más valioso.
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