El baseball es por mucho un juego donde verdaderamente importa la fortaleza que sumado a la estrategia correcta producen resultados. La suerte es un factor que no se debe considerar, a veces obra a tu favor y a veces en contra. En esto se parece al póker.
Lo cierto es que después de ver a los leones una decena de veces en vivo, incluyendo un par contra los archirrivales de Valencia, para los que sabemos de baseball quedó claro hace mucho tiempo que con ese equipo ni siquiera la clasificación al round robin se podría lograr.
Ya botaron al que siempre botan primero, al manager. Ya se anunciaron nombres importantes que vendrán en los próximos días a reforzar a los melenudos. Ahora solo queda ensamblar un equipo que en los 18 juegos restantes puedan descontar esos 3 juegos y medio que nos separan de la clasificación.
Nos quedan 4 juegos con Bravos, el peor equipo de la liga.
4 juegos con Caribes que son mortales.
2 con las Aguilas del Zulia que andan bien.
2 contra los irreconocibles Tiburones
3 contra los temibles Tigres de Aragua
y 3 contra el Magallanes.
9 en casa y 9 de visitante.
Que dulce sería ver a estos Leones arrasar con la liga y si bien no quedar campeones, arrebatarle ese 5to lugar al Magallanes, así sea en el último juego en Valencia el 29 de Diciembre, clasificando al todo contra todos. Con eso la temporada se consideraría salvada.
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