The Flight of the Conchords, la actitud correcta

Hace poco descubrí a este grupo llamado The Flight of the Conchords. Lo que parece ser un dúo de mongólicos cantando temas infantiles en realidad son un par de excelentes músicos, cinematógrafos, escritores y compositores que dan en el clavo con cada una de sus canciones.

Definitivamente están en el genero de comedia y se pasean por todos los tipos de música a pesar de concentrarse en el FOLK que pronunciado en neozelandés se escucha más como FUCK, de ahí el título de su gira "Folk the World".

Ser de Nueva Zelanda es lo primero que los hace cómicos y diferentes. Provenientes de esa remota isla que provoca conocer, su óptica del mundo nos da un punto de vista fresco y limpio de todo. La primera temporada de su serie las pasan aquí por MAX Prime. Autotitulada, Jemaine & Bret llegan a la Gran Manzana a triunfar en sus carreras artísiticas, para encontrarse con el despiadado mundo occidental en el que vivimos. La dinámica se la pueden imaginar ya que no se las quiero contar para que sigan la serie. Estoy seguro que pronto serán muy populares aunque ya se ganaron un Grammy siguen siendo un poco underground.

Lo mejor de TFC es la actitud que tienen en la vida, quieren triunfar pero no están dispuestos a matar a nadie a cambio. Todo lo contrario de lo que nos enseñan a diario. En uno de los capítulos de la serie son discriminados por un vendedor de frutas ambulante hindú, que se rehusa a venderles una manzana por el hecho de ser neozelandeses. De manera xenofóbica, Sinjah (primero de derecha a izquierda) los maltrata por provenir de una isla que fue colonizada por presidiarios, violadores y criminales de la más baja categoría del imperio británico. Por vivir montados en sus kanguros, brincando de un lado a otro y otras acusaciones típicas cuando se trata de crear fronteras entre razas. Todo el problema se soluciona cuando aclaran que eso no son los neozelandeses sino los australianos...

De igual forma la reacción de Jemaine & Brett es la de buscar el dialogo y cualquier solución, siendo lo más agresivo que encuentran aprender a "pintar una paloma" con la mano.

Que contraste con las posiciones de los extremistas militares y religiosos. Recientemente tuve la oportunidad de ver Letters from Iwo Jima, una película que se puede recomendar, aunque creación de Clint Easwood & Spielberg no cuenta con ningún actor norteamericano de renombre, y expone la situación crítica a la que se sometió la última línea de resistencia del emperador ante la infinita superioridad del ejercito norteamericano en la segunda guerra mundial. Así como muchos hoy en día, para los japoneses el rendirse no era una opción. Había que morir por la patria, ya que tus ideales siempre deben coincidir con los de tu nación y los líderes que la comandan. Al mismo estilo de Hitler este pensamiento acompañó a muchos al suicidio.
Dirán que se trata de posiciones cerradas del pasado, pero yo donde volteo veo intransigencia e intolerancia al borde de considerar la exterminación del otro bando la única solución.
Como dicen TFC hay muchos Mutha Huckers por ahí, pero que chip se debe tener en el cerebro para considerar o aprobar el uso de la fuerza extrema como medio de solución. Entiendo que hay gente que no comparte tus creencias, tus costumbres, tus modales. Entiendo que no desees estar cerca de ellos, que tu familia se relacione con esos individuos, pero si forman parte de tu sociedad debes integrarte o alejarte, buscando rodearte de aquellos que se parecen más a ti. Pero cuidado te pasa como a mi un día voy a voltear y no voy a ver a nadie a 100km. a la redonda.